Esta festividad de Sequeros se vincula con una de las leyendas más populares de la Sierra de Francia, la de la Moza Santa, que en 1424 profetizó el hallazgo de la Virgen de la Peña de Francia y la posterior construcción de algunos de los conventos del entorno.
Comienzan con solemnes vísperas en la iglesia del Robledo, seguidas de una misa y la procesión de la Cruz, adornada con un paño bordado en sus brazos y cientos de claveles. La procesión parte desde la ermita del Robledo y se dirige hacia la plaza del Altozano, donde se lleva a cabo El Ofertorio, acompañado por la música de una charanga y la bendición de los campos.Además de estos actos religiosos, las festividades incluyen comidas populares y verbenas.